Uno de los enigmas más grandes que tenemos por resolver es el mar. Imaginar la posibilidad de poder conocer y estudiar todas las formas de vida que habitan en él suena fantástico. Ahora piensen en qué tan hermoso y divertido sería tener la oportunidad de observar a estos seres, y algunas de sus habilidades, a unos cuantos kilómetros de casa, sin correr algún riesgo de ahogarse. Suena genial, ¿no? Supongo que esta es la visión positiva de las personas a las que se les ocurrió hacer espectáculos lucrativos con animales cautivos, pero nunca pensaron en las consecuencias.
Aunque la industria del entretenimiento con animales salvajes es
grande, en este escrito nos centraremos en las ballenas orcas, también
llamadas “ballenas asesinas”.
Alrededor de 1970, en Washington, empresas como Seaworld, Sealand,
pagaban por la caza de ballenas orcas. Estas cazas eran ejecutadas con barcos,
aviones, lanchas de motor y hasta bombas, acorralando a toda la manada,
teniendo el objetivo de quedarse con las ballenas más jóvenes. Debo de
mencionar lo difícil y laborioso que es cazarlas, ya que son animales muy
inteligentes, siempre están en manada, sus tamaños son desde 7.7 mts y 4.4
toneladas (en hembras), hasta 9 mts y 5.5 toneladas (en machos), por lo que
aunque tomaran a las más pequeñas era difícil transportarlas y mantenerlas con
vida a todas. Cuando las ballenas no sobrevivían al traslado tenían que
abrirles las colas para ponerles rocas y anclas haciendo que se hundieran.
Cuando el estado de Washington (en 1976) se enteró de esto, fue prohibido en su
jurisdicción; eso no detuvo las cazas, pues ahora lo empezaron a hacer en
Islandia.
Tilikum
Tilikum fue una ballena famosa ya que fue la responsable de tres
asesinatos a humanos. Cuando Tilikum fue transportado a Sealand (un lugar
flotante con redes en Canadá) no tuvo una buena bienvenida por parte de las
otras orcas, ya que estos animales son muy territoriales.
Los métodos que utilizaba el adiestrador eran intensos: el
entrenador ponía a una de las orcas que ya estaban adiestradas con Tilikum,
cuando Tilikum no hacía los trucos u obedecía dejaban sin comer a ambos
animales causando que la otra ballena atacará brutalmente a Tilikum. Para
agregarle más a estos horrorosos años de formación de la orca, durante las
noches las encerraban en cubículos de 6 mts de longitud con 9 mts de
profundidad para que no rompieran las redes de las piscinas y pudieran escapar.
Cabe mencionar que estos animales recorren alrededor de 65 km diarios en la
naturaleza y se sumergen de 30 a 150 mts de profundidad. Durante su encierro de
noche las otras tres orcas atacan a Tilikum.
Nuestra vida en el confinamiento, ha sido difícil. ¿Cómo te
sentirías si el resto de tu vida fuera solo eso? ¿Cómo te sentirías si además
de estar encerrado, las personas que habitas son totalmente desconocidas? ¿Cómo
te sentirías si, además, estas personas te agreden físicamente y no tienes a
donde escapar?
Habrá algunas personas que digan: “no es lo mismo”, y
efectivamente, no es lo mismo. Al examinar el cerebro de una ballena orca los
biólogos notaron que tienen una parte del cerebro que nosotros no, llamada
“hendidura paralímbica” a ciencia cierta no se sabe el uso de esta parte del
cerebro, pero se sospecha que tiene algo que ver con el procesamiento de las
emociones, también se cree que el cerebro de las orcas está muy desarrollado en
el aprendizaje, las emociones, la memoria a largo plazo, la autoconsciencia y
la concentración. Por lo que podemos concluir que las ballenas orcas tienen
relaciones emocionales aún más complejas que los humanos.
El 20 de febrero de 1991, Keltie Byrne de 20 años de edad, fue la
primera victima de Tilikum. Fue atacada en plena exhibición. Gracias a esto
Sealand of the Pacific, en Canadá, fue cerrado permanentemente.
Inmediatamente Seaworld se interesó por el semental Tilikum,
comprandolo en 1992, donde sufrió de violencia por parte de las otras orcas del
tanque. Las orcas macho, en la naturaleza, toman distancia de las orcas
hembras, pero en un tanque compartido por tres orcas no podia alejarse
demasiado. Así fue aislado por su seguridad con un barrera de metal. Algunas
orcas han muerto a causa de esta violencia entre ellas. Por ejemplo, en 1988
Corky fue atacada brutalmente por Kandu, ya que no eran de la misma
familia.
Cuando nacen crías en cautiverio a una pronta edad las alejaban de
sus madres para venderlas o trasladarlas a otros parques. Tal como le sucedió a
Kalina y Takara (cria) en 1990.
Durante los recorridos del parque decían que vivían de 25 a 30
años de edad, cuando la realidad es que viven casi los mismos años que los humanos.
Su esperanza de vida disminuye bastante porque las orcas en cautiverio
desgastan sus dientes contra las paredes de los tanques llegando a extremos de
exponer los nervios haciéndolos más propensos a infecciones y tienen problemas
psicológicos y de estrés en cautividad.
En 1987 un entrenador murió porque una de las orcas del tanque lo
aplasto de un salto. Los expedientes judiciales demostraron que Seaworld había
documentado más de 100 casos de agresividad hacia los adiestradores por parte
de orcas entre 1988 y 2009, donde todavía se utilizan a las orcas con fines de
lucro y aunque al día de hoy se dejaron de hacer espectáculos, en Seaworld,
éstas siguen en cautiverio.
En un artículo de National geographic menciona que en el 2019 aun
se contaban con 62 orcas en cautividad en todo el mundo.
En 2017 California ilegalizó la cría de orcas en el estado, poco
después Seaworld anunció que pondría fin a su programa de crías de orcas en
cautividad y afirmó que sus actuales orcas serían las últimas.
Adam Schiff, demócrata de California, ha presentado propuestas
para acabar con la exhibición de orcas. En Canadá está a punto de aprobarse una
ley federal que prohibirá exhibiciones de cetáceos cautivos. A pesar de que
estos países comienzan a entrar en razón, en otras partes del mundo están
comenzando un nuevo desastre: China posee 76 parques marinos operativos y otros
25 en construcción.
Desgraciadamente pasó mucho tiempo para que los responsables del
cautiverio de las orcas entraran en razón, después de 49 años, aproximadamente,
se están tomando medidas para acabar con esto. 49 años de cazar a 3 orcas de
las que solo una conseguía sobrevivir al traslado para que después de 30 años
terminará una vida de sufrimiento. Gracias a todos estos años de cazas
excesivas, el dia de hoy las ballenas estan peligro en de extinción. Aunque las
cosas parecen haber terminado en el norte de América, apenas estan comenzando
en el otro lado del mundo. Llegara el punto en donde las unicas Orcas que
podremos ver seran en cautiverio.
A pesar de las terribles noticias acerca de estos asombroso
animales, hay un rayo de luz. Canadá albergará un santuario para cetáceos en
cautividad. Estará en la costa este, en concreto, en Nueva Escocia. El lugar
albergará únicamente a orcas y belugas que hayan estado en acuarios o parques
acuáticos y hayan quedado en libertad. En Estados Unidos, la organización
estadounidense Whale Sanctuary Projet escogió el lugar: Port Hilford. «Es un
sitio ideal para las ballenas procedentes de parques marinos y acuarios», señaló en un
comunicado Charles Vinick, director ejecutivo de la entidad, ocupará 40 hectáreas
en la bahía, acogerá a ocho cetáceos y estará delimitado por una red especial
para que puedan nadar y sumergirse a sus anchas sin que sufran las consecuencia
del paso de las naves. Además, estos animales tendrán que ser alimentados
puesto que carecen de habilidades para subsistir por
sí mismos. Los primeros llegarán a finales de 2021.
Lo que nos queda por hacer es no promover los parques acuáticos
con entretenimiento con las orcas. Es más glorioso observar a las orcas en su
hábitat natural, cuando están sanas y en su manada.
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