Limerencia

Hace mucho no escribía en ti. (Doy unos suaves golpes a mi vieja libreta para desenpolvarla) hoy tengo dudas y siento una gran euforia, así que vuelvo a refugiarme en tus cálidos espirales. 

Hoy, me di cuenta de que me enamoré. Eso es un gran conflicto porque hace muchos otoños que el amor y yo estamos divorciados. Sí, sé que yo siempre he puesto nuestra relación en la cuerda floja, pero es que, cómo no hacerlo. ¿Como no arruinar algo que constantemente me estaba lastimando? ¿Cómo no arruinar eso que se supone que te debería de dar alegrías, pero lo único que te da, es la necesidad subastar tu valía? No, no gracias yo soy mejor sin el amor. 

Pero como siempre, no puedo ganarle. Es un toro terco que por más rejas que coloque menos para de atravesarlas con sus cuernos. Hoy fue ese día, en el que sentí que la última reja ha sido destrozada. En mil pedazos destripada. 

Hoy, como cualquier otro día lo vi. Pero esta vez él tenía algo diferente. Su sonrisa brillaba más que de costumbre, su voz al cantar era más dulce que la de cualquiera, preferiría escuchar esa voz que a mi canción favorita, su risa boba que al entrar inyectaba en todo el lugar me estremecía y fue ahí, fue ahí donde escuché un "crac". El toro rompiendo la última reja, el palpitar de mi corazón se aceleró, mi pecho se inflaba, un suspiro, mi rostro: una sonrisa que daba vuelta a mi cabeza, pupilas dilatadas como aquella plastilina que en el sol reposa a sus anchas. Solo quería estar con él, tomarle de la mano, besar ese lunar en su dedo pulgar. Pero sobre todo, lo que más quería era hablar más con él. Si yo tuviera 30 minutos diarios para hablar con él sería feliz. Lo más loco de todo esto es que no lo conozco y me encanta, no lo conozco y verlo me provoca una dueuforia. 

¿Alguna vez les ha pasado? ¿Sentir ese amor desenfrenado? ¿O es que soy una persona atrabancada? 

La noche ha invitado mi habitación. Ahora me pregunto: ¿sino lo conozco como es que me gusta? ¿De verdad me gusta o no es que todos amamos sentir esa limerencia? Es que ella provoca que todo sea de colores hermosos, que no importa que tan mal esté el dia, si ella está presente todo se vuelve una gran algarabía. 

Cierro la libreta, la colocó en mi pecho y pienso. 

Yo creo que todos estamos enamorados de la limerencia, de esa idea de estar enamorados porque a ver, entonces ¿por que las parejas terminan? ¿por qué se termina hasta divorciado? ¿Cómo controlar tus expectativas de la otra persona? ¿cuándo realmente puedes decir que no idealizas a esa persona? ¿Cuando puedes decir que amas a alguien? Hace un año yo tennía todo esto claro, pero ahora todo viene de lleno de la misma mierda. ¿En realidad he cambiado tanto? 

Yo amaba estar enamorada de alguien, pero ahora me da miedo que el toro sea libre por las praderas. ¿Que tanto han cambiado ustedes? ¿Eres consciente de tu cambio? O es que te ha pasado como a mi y nunca te diste cuenta de cuando.

Lilith