Este es un viaje que hice y no sabía que no iba a regresar a la normalidad.
Todo comienza el 9 de febrero del 2020, un viernes peculiar, ese día fui a la escuela con normalidad, porque ese día a las 4 de la tarde iba a tomar un vuelo a CDMX con mi papá y la verdad me emocionaba mucho. Cuando en la escuela estábamos planeando que nos robaremos el gel antibacterial; ya que en el salón había más de 7 botes de 2 litros cada uno y pensamos que no iba a verse muy extraño que faltara uno. Yo decido que hasta el sígueme te jueves, ya que es el día que yo iba a regresar de mi segundo viaje. Al finalizar el día esperaba a que llegaran por mi de la escuela para irme directamente al aeropuerto. La niña con la que salía me acompañó todo ese rato que fue más de una hora y la pasamos muy bien platicando de cuando iba a volver, llegaron por mi y llegamos al aeropuerto y pasamos los filtros de seguridad y nos fuimos a CDMX y estaba lloviendo muy fuerte. Él camino estábamos viendo toda la ciudad y lo diminutos que somos, llegamos como a las 6 y no hay muchas cosas que hacer ya que todavía estaba nublado y oscuro.
Al
día siguiente conocimos demasiados lugares y muy hermosos y conocí a los
Hermanos de una de muchas Logias y conocí su manera de trabajar un poco rara y
muy peculiar.
Conocí
el ángel de la independencia, el zócalo, bellas artes por dentro y fuera,
barrio chino, monumento a la revolución, templo Mayo, catedral, Torre
Latinoamericana, monumento a Benito Juárez, Basílica de Guadalupe, alcaldía
Cuauhtémoc, museo soumaya, Castillo de Chapultepec y dimos una camina por
Avenida reforma en
solo 2 días y medio.
El
domingo a las 3pm ya estábamos en el aeropuerto para dirigirnos a Guadalajara y
para el día lunes seguir nuestra aventura junto con mi hermana, su esposo y mi
sobrina.
La
última vez que fui a CDMX fue a un concierto y la verdad no me la pasé “bomba”
fue una experiencia muy distinta, esta vez si fui con nuevas expectativas y
regresé con mejores pensamientos de la ciudad.
No
regresé a la escuela y no volví a ver a mis amigos y no me pude regresar a
robarme el gel anti-bacterial, no hay que dejar lo que puedes hacer hoy para
hacerlo mañana.
(El gel tenía un olor muy muy rico).
Osmani Preciado
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